En una declaración que ha generado controversia a nivel internacional, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, no descartó la posibilidad de recurrir a la fuerza militar para retomar el control del Canal de Panamá y adquirir Groenlandia. Durante su segunda rueda de prensa tras las elecciones de noviembre, Trump enfatizó que estas acciones serían justificadas por "motivos de seguridad nacional".
“Podría ser que tengamos que hacer algo”, señaló Trump desde su residencia en Mar-a-Lago, Florida, en respuesta a una pregunta directa sobre la viabilidad de intervenciones militares. Además, acusó a Panamá de imponer "tasas abusivas" a los barcos estadounidenses que transitan por el canal, y criticó la decisión de transferir su administración al país centroamericano en 1977.
Reclamos por el Canal de Panamá y críticas a China
Trump afirmó que el Canal de Panamá es "vital" para los intereses económicos y de seguridad de Estados Unidos, subrayando que fue construido por los estadounidenses con grandes sacrificios. “Nunca debimos haber tomado esa decisión. Se lo entregamos a Panamá, no a China, y ahora es una amenaza para nosotros”, sostuvo, haciendo referencia a la participación de empresas chinas en su operación.
Ambiciones territoriales hacia Groenlandia y Canadá
El presidente electo también mencionó su interés en Groenlandia, argumentando su importancia estratégica, y no descartó presiones económicas para avanzar hacia una posible anexión de Canadá. “Nuestra fuerza económica es poderosa, y podríamos eliminar esa frontera al norte para garantizar nuestra seguridad”, añadió Trump.
Estas declaraciones han provocado reacciones diversas a nivel global, con analistas y líderes políticos calificándolas de preocupantes e inusuales, mientras se espera que los gobiernos aludidos respondan oficialmente a los comentarios del mandatario.
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