El ministro de Ambiente, Juan Carlos Navarro, reiteró que el desarrollo del Puerto Barú solo será posible si se cumplen rigurosas medidas ambientales. Este pronunciamiento se realizó durante una gira de trabajo en la provincia de Chiriquí, luego de que la Corte Suprema de Justicia desestimara una solicitud de suspensión provisional del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto.
Navarro destacó que el Puerto Barú, aprobado en la administración anterior, será sometido a estrictos controles ambientales en coordinación con la Autoridad Marítima de Panamá (AMP), las autoridades locales y la empresa responsable. “Sabemos que es un proyecto importante para Chiriquí, pero solo avanzará si cumple con las normativas necesarias”, subrayó.
El ministro planteó varias interrogantes técnicas sobre la operación del puerto, como el manejo del dragado, la disposición del material extraído y la capacidad del canal de acceso para el tráfico marítimo. También expresó su preocupación por la respuesta ante posibles derrames de combustible en los manglares circundantes, enfatizando la fragilidad de este ecosistema.
“Por instrucciones del presidente de la República, José Raúl Mulino, apoyaremos el desarrollo económico sustentable en Chiriquí, siempre exigiendo el cumplimiento de las normativas ambientales”, afirmó Navarro, quien enfatizó el compromiso del Gobierno con un desarrollo que equilibre crecimiento económico y protección ambiental.
Con este enfoque, el Ministerio de Ambiente busca garantizar que las inversiones en la región se realicen de manera transparente y responsable, promoviendo el bienestar de la población y la conservación de los recursos naturales.
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